La nueva evidencia está respaldando la teoría de que el CBD derivado del cannabis puede ayudar a quienes padecen la inflamación pulmonar severa que ocurre en los casos más graves de COVID-19.
El estudio de investigadores de la Universidad de Augusta en Georgia sugiere que el CBD puede tener un impacto positivo en el SDRA o el síndrome de dificultad respiratoria aguda. Un síntoma peligroso en COVID-19 causado por una respuesta inflamatoria hiperactiva. Aparte de las medidas de apoyo, no existe una cura definitiva para el SDRA. Ilustrando la urgente necesidad de modalidades terapéuticas creativas y efectivas para tratar esta compleja condición.
Otro investigador canadiense indica que ciertas cepas de cannabis podrían bloquear los efectos del coronavirus en el cuerpo humano. Pero todavía no hay pruebas suficientes para dar luz verde al consumo de marihuana bajo la excusa del covid.
What the Studies Say
Los mismos científicos tienen la tarea de analizar 400 variedades de cannabis sativa. Y así determinar si la planta tiene algún efecto sobre el nuevo coronavirus, SARS-CoV-2. La investigación del Dr. Kovalchuk lo llevó a enfocar su análisis en una docena de cepas que han producido resultados prometedores en la reducción de los efectos del COVID-19 en el cuerpo.
“Algunos de estos han reducido la cantidad de receptores [de virus] en un 73 por ciento, la posibilidad de que estén involucrados es mucho menor”, dijo el Dr. Kovalchuk. "Si pueden reducir la cantidad de receptores, es menos probable que se infecten". Hasta la fecha, ningún estudio revisado por pares muestra que el cannabis o sus compuestos puedan ayudar específicamente con COVID-19. Pero los autores de este artículo dicen que la evidencia que sugiere que puede ayudar vale la pena seguir investigando.
Recomiendan que los científicos comiencen estudios para investigar. Si el CBD se puede usar para reducir la inflamación y la ansiedad en los casos de COVID-19, como complemento de los medicamentos antivirales. Si bien esto no sugiere que el cannabis deba considerarse una cura o tratamiento de COVID-19 por sí solo. En realidad, sugiere que puede tener el potencial de ayudar a reducir la inflamación y la ansiedad en quienes padecen la enfermedad.
