VIDA EN PRISIÓN POR CANNABIS
Richard DeLisi es actualmente el preso con más años de servicio por delitos no violentos de cannabis en los Estados Unidos. Richard ha estado encarcelado desde 1988 sirviendo más de 32 de sus 90 años
Durante el tiempo que estuvo en prisión, fallecieron su hijo, su esposa y ambos padres. Será liberado a tiempo para Navidad con los hijos y nietos que le quedan, que será la primera vez en más de 30 años que podrá pasar la Navidad en casa.
CONOCE A RICHARD
La reputación de Richard DeLisi como un hombre de familia amable, cariñoso, educado y generoso se remonta a siete décadas. Aquellos que fueron bendecidos por ser sus amigos fueron considerados y tratados como familia.
Durante las últimas tres décadas de encarcelamiento, Richard se ha propuesto continuar realizando buenas obras para los demás. Richard ha participado constantemente en programas para mejorar su propia vida y la vida de quienes lo rodean. Cuando Richard llegó a la prisión, no podía leer ni escribir debido a una dislexia no diagnosticada que lo había perseguido desde su niñez.
EL DELITO
On September 19, 1988, Richard DeLisi was arrested and charged with Trafficking in Cannabis and Conspiracy.
Poco más de un año, después tuvo serios problemas financieros. El gobierno se apoderó de su negocio en ese momento. También sus autos y efectivo. Se quedó sin nada.
Luego se le acercó su viejo amigo del contrabando J.J, quien le ofreció una solución a sus problemas. Una última carrera. Luego obligó a Richard a contrabandear 1500 libras de cannabis de Columbia a Florida.
Richard no sabía que su viejo amigo J.J era un informante de la policía y, aunque toda la situación era ilegal, algo que llamamos trampa: la acción de engañar a alguien para que cometa un delito para asegurar su enjuiciamiento.
En el juicio de 1989, el abogado de Richard argumentó la defensa de la trampa. Pero no tuvo éxito.
While the Florida sentencing guidelines recommended Richard be sentenced to between 12 and 17 years in prison. The judge decided to give him 3 consecutive 30 year sentences totaling to a 90 year prison term. Throughout Richard’s over 32 years of incarceration, he has committed himself to education, rehabilitation, and self-improvement. Richard was determined to use his time while incarcerated to better himself.
SUS PALABRAS
No pasa un solo día que no me arrepienta de los terribles errores que cometí en 1988 que me han perseguido durante muchos años de mi vida, que me hicieron (perder) los derechos más preciados y fundamentales de nuestra constitución: libertad, vida y libertad.
