Hoy en día, el cáñamo es conocido internacionalmente como una solución ecológica para materiales de construcción, así como para reemplazar el plástico. La industria automotriz ahora está considerando el cannabis para la producción de automóviles. De hecho, un coche fabricado con cáñamo evitaría una cantidad significativa de materiales no renovables.
Aunque el 95% de los materiales utilizados para construir un automóvil se pueden recuperar, según el Foro Económico Mundial, los coches no son ecológicos. A muchos clientes les gustaría viajar de una forma más responsable y respetuosa con el medio ambiente. Además, los coches no siempre se utilizan hasta el fin de su vida.
La principal fuente de emisiones es el combustible que se utiliza para impulsar los automóviles. Desafortunadamente, el cambio a la energía eléctrica aún no está suficientemente extendido como para reducir significativamente los gases de efecto invernadero.
Algunas empresas ahora están considerando alternativas más ecológicas para producir automóviles, incluido el cannabis en los procesos de fabricación.
Porsche desarrolló recientemente un modelo de carreras con tejido de cáñamo que reemplaza la fibra de carbono presente en sus placas de carrocería.
Aptera Motors, una startup especializada en vehículos sostenibles, ha desarrollado un vehículo de tres ruedas que puede transportar a dos personas. El automóvil tiene un panel solar que se puede complementar con más paneles solares en el capó y el portón trasero para extender el alcance del automóvil a 1,000 millas (1600 km aproximadamente).
Estos vehículos con energía solar, construidos a partir de un compuesto de carbono, kevlar y cáñamo, están reservados para un fabricante de automóviles de San Diego, que espera su entrada en producción al final de 2021.
8,000 personas ya han pagado un anticipo por el vehículo, que se venderá entre $26,000 y $46,000, dependiendo de las características del vehículo. El precio es mucho más bajo que los de sus otros dos competidores, el Tesla Model 3 y el Lucid Air, que se venden por $36,000 y $77,400 respectivamente, según el International Business Times.
Aptera actualmente está construyendo una fábrica en la ciudad de San Diego. Los fundadores esperan ventas de 2.000 vehículos por año inicialmente, con un objetivo de 20.000 vehículos por año cuando desarrollan más modelos.
