Croacia, con una historia tan maravillosa y sus hermosos paisajes, no es de extrañar que sea un destino de primera para los veraneantes de todo el mundo.
Desde Ultra hasta Sonus, festivales de música, montañas y maravillosas playas, 101 dálmatas y tantas otras cosas maravillosas provienen de este increíble país.
Sin embargo, este año, podría atraer a una multitud completamente nueva, mientras consideran la posibilidad de legalizar el cannabis a nivel recreativo. Lo que sería muy interesante, al haber sido siempre un destino turístico popular, pues esto podría impulsar la economía en lo que ha sido un año muy difícil para la industria y las empresas en toda Croacia.
Lo que debería hacer Croacia
Tomaría una visión mucho más seria del cáñamo, sus aplicaciones y sus posibilidades económicas, especialmente en el contexto de aliviar las cargas sobre el medio ambiente.
A mediados de diciembre de 2012, el Parlamento croata aprobó una ley para despenalizar las cantidades de uso personal de sustancias ilícitas, por lo que la posesión de estas cantidades ya no es un delito sino una falta menor.
Croacia no establece cantidades para uso personal y deja su especificación a los tribunales para cada caso particular.
Cannabis medicinal en Croacia
En 2015, Croacia legalizó el uso de cannabis con fines medicinales.
Según la ley, los médicos pueden recetar medicamentos que contengan THC en diferentes formas.
Hasta esta actualización, los productos de cannabis medicinal solo se podían importar a Croacia. Con la nueva ley se permitió el cultivo y desarrollo dentro del país, al mismo tiempo que se abre a la inversión exterior.
Según el diputado croata Mirela Holy (SDP), la próxima legislación propuesta permitiría a cada adulto cultivar hasta nueve plantas de marihuana con alto contenido de THC para uso personal. "Nadie ha muerto nunca por una sobredosis de cannabis natural", enfatizó.
Parece que los cambios en todo el mundo después de la COVID-19 podrían dar lugar a que algunos países abran sus mentes a una forma diferente de pensar. Sobre todo para facilitar nuevas vías de ingresos en las economías en apuros, al tiempo que se normaliza una medicina que ha sido tan brutalmente calumniada y silenciada durante tanto tiempo.
